LA MIRADA DE UN MEDICO (Pandemia y Empatia.)

 

SON MEDICOS, NO ROBOTS.

    

 Las emociones , las experiencias y nuestros propios deseos atraviesan a diario nuestra vida.

En este texto breve el Dr. ALI ANIBAL RODRIGO (Medico de Familia Reside en la Actualidad  en Rio Grande, Tierra del Fuego,) nos describe las dos caras de una misma moneda, cómo el llama al sistema de salud.

                                      CUANDO UNO SE PLANTEA LA EMPATIA, SE LA PIENSA , COMO MODO DE VIDA ,SE RECUPERA Y SE VUELVE A SONREIR SATISFACHO DE SER FIEL A LOS PRINCIPIOS.

                     LOS INICIOS ….  

Como queriendo volver al principio he de relatar mis inicios no tan prósperos pero si afortunados por el hecho de experimentar lo bueno y lo malo de la medicina, y uno se pondría a pensar porque lo malo si la medicina es buena , sin embargo para aquel a quien se diagnostica un tumor maligno esta noticia emitida por un profesional que representa a la medicina preocupa y si este no tiene la empatía necesaria se convierte en una medicina que pasa a ser lucrativa a partir de las dolencias y problemas de salud de las persona, o una desgracia por no ser meticuloso al dar el informe al damnificado y familia, sin embargo para aquellos que tratamos de dar un rostro a quien porta dicha enfermedad , conocer su núcleo familiar, si es que esta persona lo tiene, y la comunidad en la que se inserta esta familia , la medicina familiar es una herramienta útil y más que necesaria para aquellos que desde lo más interno nos nace , por vocación como lo llaman algunos, por sacerdocio le dicen otros; tratamos de acercar una medicina noble sin egoísmo, pensando solo en esa persona, María o Juan, aquel que a través de la medicina se logró conocer a tiempo o no dicha situación de salud.

Es aquí entonces que la medicina tiene distintos ángulos dependiendo con que ojos se la mira, aquel padre agradecido porque su bebe nació a 140 km de la ciudad más cercana a su pueblo y de la mano de un médico rural, o aquel que el “zurdo” decidió hacerse notar con ritmos distinto a todas las anteriores veces luego de hacer vibrar el motor de su Chevy una joyita para pavonearse entre amigos y fanáticos, para recordarle que sus años mozos pasaron y es hora de medir las emociones de cada momento.

El conocimiento y la Empatía

La medicina sin corazón no lo es nada, el corazón sin el conocimiento carece de utilidad en la medicina, por eso considero que la sabiduría adquirida en parte por la lectura, experiencia y los tutores cuya sabiduría nos la son compartidas debe ir acompañada de corazón y estas adheridas inherentemente a la medicina, solo aquel que se detuvo a mirar los rostros de los acompañantes de una persona con una enfermedad terminal, o de aquel cuyo corazón sufre de un síndrome coronario o peor aún de aquellos que vieron los ojos de su ser amado perder la luz para volverse opacos comprende que la medicina es mas allá de una especialidad, es mas allá de un órgano que se moviliza hasta el consultorio como si hubiera surgido de un repollo a cual cuento de dónde venimos cuando niños.

A través de mi recorrido por ciudades y pueblos me di cuenta de la importancia del conocimiento y empatía para ejercer una profesión humanizada y de calidad.

Es así como llego a encontrarme en ambas caras de la misma moneda; En el hospital “está una hipertensa con 250 de sistólica en curaciones”, “una deshidratación en R4” y en algunos casos que deteste y por lo que increpe a mi colega, “¿y eso que es en R1?”.

Hoy un sistema desbordado que echa por tierra todo lo transmitido a mis colegas en el hospital por ser todos dificultad respiratoria, si antes no había tiempo para conocer los nombres de los paciente, hoy ni siquiera se sabe lo que hay que ir a buscar al domicilio sea hombre o mujer, solo una dificultad respiratoria, no hay tiempo para banalidades, “en aislamiento respiratorio solo Covids (+), aquellos en las R los sospechosos”, les hemos quitado no solo nombre sino sexo y ni que hablar de la personalidad de los pacientes ya que hemos perdido la nuestra en un sistema desbordado y que no reconoce esfuerzos a tal punto de retirar vacaciones, así como lo menciono “vacaciones” ni que hablar de aumentos jaja.

Distinto es el centro de salud, allí doña Juana chilena que está de paso por nuestro país visitando a su hijo y nuera viene a control luego de que 24 hs antes tuviera 250 de sistólica, o doña Nelly cuya tos corresponde a una neumonía y se descartó otro tipo de infección respiratoria.

Dos mundos tan distintos y a la vez el mismo diagnóstico y tratamiento, pero con distintas miradas de distintos profesionales y si se quiera hasta del mismo medico según en donde se encuentre y no por ser carente de empatía, sino porque un sistema automático no permite demoras en un hospital puesto que la demanda aumenta, mientras que en el centro de salud la empatía indica como se debe conducir el médico para con su paciente, si se quiere su prójimo.

Todo lo mencionado hasta ahora sucede años tras años, en un hospital la atención carece de rostro mientras que en un hospital rural o en un centro de salud desde lejos conocemos el nombre de nuestro paciente y luego se habla del resto.

        GRACIAS DOCTOR RODRIGO, GRACIAS POR

 GENEROSAMENTE COMPARTIR TU EXPERIENCIA.

                 HOY DONDE  EL TIEMPO TE TIRONEA, TE

 DESHUMANIZA POR MOMENTOS, CEDES TU HISTORIA...

                                              CONOCIMIENTO y EMPATIA tan necesarios para transitar la vida con un poco mas de humanidad....

                                                          ¿Tenes alguna experiencia con algún medico donde hayas evidenciado este  empatía, contención ? ¿En algún momento le pudiste agradecer, hacerlo sentir valorado ,mas allá de su conocimiento? 

                                                     Te cedo el espacio ¿Compartís tu experiencia?