El brindis
En este banquete se sirvió un vino que hizo las delicias de los asistentes, en particular de los sentidos del gusto, el olfato, la vista y el tacto, que enseguida se sintieron seducidos por los placeres del vino.
Sin embargo, el sentido del oído parecía sentirse un tanto mohíno ante la imposibilidad de disfrutar al igual que el resto de los sentidos.
Para remediarlo, Dioniso propuso instaurar la costumbre de brindar cada vez que se bebiese vino, para que el sentido del oído pudiese disfrutar del sonido producido por el choque de las copas. ¡CHIN CHIN!
Seguramente circulan varias versiones de su porque, este me pareció interesante compartirlo,
¡NUESTRO BRINDIS!
¿Cómo te imaginas tu brindis?¿En qué lugar, con quien ?
Nos leemos

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